7 oct 2024

Te casas

 Bueno, te casas… o eso me dijeron.

“¿Qué sabes de la Ninoska?”

“Nada”

“Ah… Subió fotos de unos anillos”  

Ya ha pasado mucho, mucho mucho… Sé de tu boca que estas hace tiempo con alguien y yo he paseado por muchos jardines buscando una flor. No se trata de que ambos debiéramos haber parado nuestras vidas y habernos esperado eternamente hasta que sucediera no se qué… pero ¿Te casas?

Primero, me alegro… Debes sentir por él algo indescriptible o puede que tenga el dinero suficiente para hacerte renunciar a tus privilegios o ambas, en cualquier caso me alegro, me alegro mucho…

No te miento, ese era mi puesto… Una vez nos separamos, comencé una carrera contra mi mismo para poder decirte “Mira ¿y ahora? ¿Quieres estar conmigo?”… Nunca fue tan real como una meta, pero siempre tuve la intención… No lo logré, hice todo lo que pude pero no pude.

Eres… Eras… La única mujer a la que rogaria, la única a la que me sometería, la única a la que suplicaría por otra oportunidad… Ya no lo hice por ti y no lo haré por ninguna.

Siempre esperé que volvieras a volver…

Sé que esto terminó para ti hace años, desde que dijiste “Quiero que te vayas” … Para mí no, para mí fue mucho más difícil olvidarte, superarte y reemplazarte, a mi favor puedo decir que nunca quise dejarte…

Tú sabes que no creo en nada de esto, pero…

Ángel y Demonio, sin duda conocí a ambos, sin duda amé a ambos… Yo nunca dejé de amarte, nunca… ¿Cómo? De verdad ¿Cómo?     

Me alegro por ti… no con desprecio, no con remordimiento, con envidia o dolor… Me alegro porque has sabido seguir adelante, porque tu vida no se ha estancado, porque mi estocada no fue lo bastante profunda…

Así que eso, te casas

Te casas

1 oct 2024

Me gustaría escucharte. Atte Faby

Hola ¿Cómo estás?... Para ser completamente honesto me alegro de hablar contigo.

Más de una vez vi tus ojos en los ojos de alguien más o tu sonrisa en la sonrisa de alguien más, personas con las que me fui topando en el trabajo o, simplemente, la calle, pero ahí estabas despertando la pregunta dentro de mi… ¿A quién me recuerda?

Por esta y muchas razones tu nombre y rostro no han terminado de ocultarse en el horizonte.

Me alegra, me alegra saber de ti.

Señorita, nosotros tenemos una historia, las cosas que han pasado no las podemos borrar o ignorar, tanto los momentos lindos como los no tan lindos… Pero después de un año y medio las cosas habrán cambiado ¿o no?

No dudo de tu cariño, fuiste y sigues siendo la persona que más afecto me ha demostrado… No dudo de tu interés, sigues estando, a pesar de todo, a pesar de mi forma de ser, sigues estando… No dudo de ti, por Dios no dudo de ti… y lo valoro… y lo aprecio… y lo guardo.

 Desde este corazón… Eres hermosa, inteligente, femenina, cantas muy bonito, eres tierna y cariñosa, inteligente, activa y llena de vida.

Tú, que alguna vez me dijiste la frase que siempre quise escuchar, hoy vienes y haces algo que siempre he valorado… Me vienes a buscar.

No es porque yo sea una diva egocéntrica que espera a que las personas sientan la gloria de estar postrado a sus pies, no… Es solo que siempre he apreciado la valentía de alguien que toma lo quiere y si me quieres, solo ven y tómame.  

Para mí las cosas sí son muy diferentes, pareciera que en este último año y medio la vida me tiene en curso intensivo, la única constante es que mi vida no deja de estar con un pie dentro de la inestabilidad… Emocional, física, psíquica y laboral.

Hoy, no sé mañana, tengo los medios para viajar este mismo fin de semana… para traerte este mismo fin de semana… o para vivir contigo este y todos los fines de semana, pero…

Sabes lo que me encanta de ti… Y sabes lo que no me gusta tanto.

Quiero decir…

Lamentablemente sabes lo duro que soy, lo tajante y frio que soy… Y yo, aunque no lo parezca, aunque sea totalmente contradictorio, no quiero hacerte daño… De verdad, de verdad verdad, lo que más me importa, entre tú y yo, es no hacerte daño. Es cierto que puedo amarte, adorarte, mimarte y cuidarte… Es cierto que me encantaría amarte, adorarte, mimarte y cuidarte… pero solo, y tal vez es mi única condición, si traes alegría a mi vida.

Sé que la vida es complicada, sé que las personas tienen problemas y que a muchos de ellos los sobrepasan emocionalmente, sé que no es fácil, pero sé que es posible… Feliz escucho tu día o te abrazo cuando estes cargando mucho sobre tus hombros, encantado te digo al oído “Ya chiquitita, todo estará bien”… te lo juro, encantado te regalo mis brazos para que descanses en ellos de las complicaciones del día a día…

Pero ya sabes, sé que lo sabes… No quiero entregarte mi corazón para que luego lo partas al retarme por una estupidez, que me llames llorando al trabajo o que los celos te coman porque sigo interactuando con el mundo… Yo también necesito de tu estabilidad, también quiero llegar y recostarme en tus piernas, sentir la cascada de tu cabello sombre mi rosto y descansar, al fin, de las adversidades de la vida.

Te quiero Leny, te quiero mucho, tanto que no te voy a usar para satisfacer mi ego o aplacar mi soledad.


Un abrazo, un beso… un lento, delicado y de ojos cerrados, beso.


Suena a despedida, pero no... es una invitación.