24 jun 2013

Trabas



¿Cuántas veces me habré quejado de cosos que no me dejas avanzar?... Yo creo que miles…
Aunque presuma de capas e inteligente, de libre y juicioso, de responsable y contemplativo, la cruda verdad es que no valgo nada si nada hago…

Muchas son las cosas que no nos dejan avanzar en la vida, situaciones del pasado o , incluso, situaciones que aún no han ocurrido, “defectos” físicos o psicológicos, costumbres o prejuicios, son muchas las cosas que no nos dejan dar un paso a eso que es vivir…

Bien, muchas veces he tenido problemas de sueño, digámoslo así, ya que tengo cosas en la cabeza que quisiera hacer, decir, etc. y no me atrevo a simplemente tirar del hilo y deshacer el nudo, en otras ocasiones no he querido realizar tal o cual actividad por “vergüenza” a mi cuerpo o a la situación social en la que vivo, aunque esta fuese precaria o generosa eso da igual… lo que quiero decir es que cada peso que llevamos dentro es algo que no nos deja hacer la vida.

Veamos… alguna vez en mida fui muy “gordito” y de eso han quedado rastros en mi cuerpo, ya sea que estas huellas sean grandes o pequeñas, lindas o feas, superables o insuperables, son cosas que hoy pongo como ejemplo entre las ataduras que controlan mi vida… Digamos que me alejo de las playas y el verano porque no me gusta usar polera o verme en la situación de tener que quitármela, me pone nervioso pensar en alguien tocando o mirando mi cuerpo y por lo tanto escapo de esas situaciones… Bien sea yo un “monstruo” o no, un “príncipe” o no, que mis trabas tengas o no justificación, para mí lo son y creo que todos tenemos por lo menos una…
Nos cuesta aceptar lo que somos, lo que tenemos y lo que nos falta, nos centramos en nuestros defectos para poder esconderlos y nos olvidamos que tenemos virtudes que podemos explotar… estamos totalmente encadenados a nuestra trabas.
Por ejemplo… que cosas “creo yo” que tengo de malo… Tengo dientes naturalmente amarillos (no es no los lave, son de ese color), camino un poco encorvado, tengo rodillas chuecas, cuando tengo frío mis manos se ponen moradas, soy delgado y aparentemente no tengo mucha gracia… Creo que siempre tengo la razón, soy orgulloso y lujurioso, desordenado y un poco “flojo”, no termino todo lo que comienzo y me aburro con facilidad… entro otras cosas…
También soy alto y tengo una linda “sonrisa”, un color de ojos no muy común en el lugar que vivo, piernas largas y manos cálidas… Soy sincero y respetuoso, caballero y romántico, me asombran muchas cosas y me gusta probar cosas nuevas, soy espiritual y filósofo, me gusta estar inspirado y buscar la felicidad…


Todo esto son ejemplos de los que soy, de las muchas partes de lo que soy… Evaluar cuáles de ellas son trabas y eliminarlas o “destrabarlas” es importante para poder seguir adelante… 

Debo tomar la decisión de controlar mi vida y hacer, pensar y sentir cosas que realmente quiera… Estarán de acuerdo conmigo si digo que “ser flojo” es un obstáculo en la vida de cualquiera… Esto, lamentablemente para la forma de vivir a la que muchos estamos acostumbrados, solo podemos hacerlo nosotros, nadie puede cambiar por nosotros más que uno mismo… 

   Si te gusta alguien… díselo, inténtalo y haz todo lo que puedas… puede resultar como puede no resultar, pero por lo menos no dormiremos con esa angustia de querer a alguien y no saber…

   Si tienes un problema soluciónalo u olvídate de él… haz cosas, no pienses en hacer cosas…

   Tienes vicios que te molestan… elimínalos…

   Tienes defectos físicos… acéptalos, somos hermosos y perfectos para quien nos sepa mirar con amor, así como nuestra Madre…


Yo escribo como si le hablara a alguien pero me lo digo a mi mismo… Toma fuerza, aprieta tus cadenas y arráncalas de la pared a la cual están atadas… Puede que te rompas un brazo en el intento… pero todo cambio, al igual que un parto, viene acompañado de dolor… Pero un bebe y una madre vivirían mil veces e dolor del nacimiento solo para poder verse…


No hay comentarios.: