La hermana de la hermana

 No pude escribir sobre ti, es que fuiste una gran amiga… recibiste mi amor y yo el tuyo sin involucrarnos físicamente.

Disfruté cada momento excepto el último…

Te dije que no era un hombre bueno, pero tampoco malo, te mencioné lo que creo de la realidad y la existencia, te dije que siempre maximizaría mi placer...

Te dije que solo vivo el presente y que no pienso mas allá de lo que tengo frente a mis ojos, sabías que terminar nuestra relación no me dolería…

Tú me dijiste que no te importaba lo que pasara con tu hermana, tú me ofreciste, “El Faby dijo que da buenos masajes”.

Hay algo que tú no sabes, que lo saben algunas personas nada más... Tú no sabes lo adictivos que son mis besos y lo profundamente placenteras que son mis manos, pregunta si quieres.

Te metiste en un mundo de adultos que tienen sexo solo por placer. 

Pero, me queda claro por qué no me valoraste... Porque no soy un drogadicto, vago, lana pachamamico, delincuente y mentiroso... y yo me fui porque no soy un mamón, bueno porque sí, carente de cariño y amor propio.

Mala combinación.