2 abr 2024

Solo debiste sonreír

 "Faby, Faby… espera Faby!"

Yo no te hago más daño del que te haces a ti misma al tratar de sujetarme. Distintos trozos de mi pertenecieron a distintas personas y ninguno de ellos fue realmente cuidado y valorado, cada uno de ellos fue muriendo dejando atrás solo la experiencia de lo vivido, pero nada, a fin de cuentas. Hoy, después de tanto tiempo, tanta cosa, tanto vivir, llorar, caer, levantarse y reír, después de haber intentado todo lo imaginable por mi cabeza, después haber probado hasta lo más profundo de mi interior, hoy no soy de nadie, por definición y porque, simplemente, no lo soy.

Ese afán por mantenerme a raya es lo que te daña, esas ganas de domarme, de gritarme, de negarme y de mandarme, eso es lo que te daña, porque lo sabes y te lo he dicho, tú puedes ser y hacer lo que quieras, te amo, así como eres… por eso yo puedo ser y hacer lo que quiera … y ¿En qué extraño mundo, hecho de tus más surreales fantasías, yo me quedaría para recibir llantos, gritos y rechazo? Jamás, eso jamás volverá a pasar.

Solo debiste sonreír y aun estaría contigo, porque esa frase, sí esa frase, la he escuchado de tantas bocas distintas que, uno, no puedo creer que sean tantas y dos, no tiene ningún efecto en mí.

No hay comentarios.: